Queremos compartir con todos/as nuestros/as seguidores/as de las redes sociales un ambicioso proyecto que se está llevando a cabo en Trujillo, en la iglesia de Santo Domingo, en el cual se ha tenido en cuenta la conservación no solo del patrimonio cultural, sino también del patrimonio natural del que cuenta sobradamente Trujillo.
La
iglesia de Santo Domingo, de estilo renacentista, es la iglesia menos
conocida de esta ciudad. Situada en la vertiente septentrional del
cerro de la villa de Trujillo, se construyó en la segunda mitad del
siglo XVI bajo la dirección de Alonso Becerra, donde colaboró
también su hijo Francisco Becerra. Debido
a la invasión francesa de 1809 sufrió un gran ataque en su
arquitectura, aunque mantuvo su función religiosa hasta 1842.
En este contexto, se está llevando a cabo una reforma y adecuación de dicha iglesia como vivienda por parte de Ignacio Ramos Esteban y a cargo de la arquitecta trujillana Ana Iglesias González.
En este contexto, se está llevando a cabo una reforma y adecuación de dicha iglesia como vivienda por parte de Ignacio Ramos Esteban y a cargo de la arquitecta trujillana Ana Iglesias González.
La parte positiva para nuestro proyecto está en el hecho de que se han conservado y respetado los mechinales existentes en la edificación, colocándose en algunos casos tejas especiales para que puedan anidar los cernícalos primilla.
También se han colocado cristales espía, para poder observar a las parejas que aniden sin que interfiera en su biología ni les ocasione ningún tipo de perturbación o molestia.
Desde la organización del proyecto para la conservación de la ZEPA urbana de cernícalo primilla en Trujillo le agradecemos enormemente a la arquitecta Ana Iglesias González que haya tenido en cuenta en sus actuaciones la conservación de las especies que podrán habitar tanto en los muros como en el tejado de la iglesia. Esperamos que sirva de ejemplo para actuaciones futuras de cualquier vecino/a de la localidad.